Parece que respira, todo uno. Y es esa sensación tan buscada, la de las masas.
La de las pieles, todas unidas, que se hacen una. Y los dibujos, las tintas negras que se mezclan, y a veces forman al Che o solo dicen Mamá.
Pero nos gusta este juego, y reímos y saltamos, al tiempo de una música que nos deshace como "unos" y nos hace "todos", y a eso nos gusta jugar. Al menos una noche impersonal.
Los humos nos confunden, flotan en el aire, y el calor se instala sin pedir permiso. Se pega a los cuerpos, se adhiere a los deseos. Una conciencia que se ha ido de vacaciones.
El monstruo devora todo lo que encuentra a su paso, y es feliz.
Plaza de Mayo
"La multitud que se reúne"
Domingo 7 de octubre de 2007
4 comentarios:
Hasta siempre comandante!
"El monstruo devora todo lo que encuentra a su paso, y es feliz"
no se por qué pero me gusto esa frase
Brillante, diosa...
El Hombre de la Estrella está sonriendo, lo se...
Los monstruos de las masas y sobretodo los que devoran todo, me suenan a animales sin consciencia que devoran todo, si bien generados por una personalidad terminan siendo impersonales y carentes de ética en nombre de la ética se devoran la ética. Entonces prefiero masas que conserven la consciencia y prefiero las masas secas a las finas porque mucha crema me cae mal.
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